En este blog encontrarás....

Pretende ser un blog informativo sobre terapias naturales, donde iré explicando los casos más interesantes que van surgiendo y donde, siempre que lo permitais, añadiré fotos del antes y el después, porque no es lo mismo leerlo que verlo...

¿En qué consiste la terapia?

El principio
Hay que tener en cuenta que un animal se comunica de muchas formas, a través de sus gestos, su mirada, su estado de ánimo, su estado físico, su carácter...todo nos habla de él, todo es interpretable. A veces creemos saber lo que él quiere pero la primera cuestión a saber es: ¿ es lo que realmente quiere o lo que nostros queremos para él? Queremos a nuestros compañeros animales pero a veces confundimos nuestros deseos con sus deseos reales; la manera de saber exactamente lo que quieren es preguntándoles directamente, y la forma más clara es hablando con su inconsciente. El péndulo nos brinda la oportunidad de comunicarnos con el animal sin dejar lugar a las interpretaciones o suposiciones.

¿Cómo funciona un péndulo?
Hay que saber que el péndulo es un mineral, que unido a un cordón y sujeto con la mano girará y se moverá dando así respuestas afirmativas o negativas (sí o no). La mano del interlocutor debe ser una mano experta ya que sino se conoce la práctica puede contestar subjetivamente según nuestros deseos y desbaratar así una oportunidad de comunicación real. Un buen uso nos puede ayudar muchísimo en el diagnóstico y en el propio tratamiento. Yo personalmente lo uso para saber qué padece el animal y cómo tratarlo, tengo un protocolo estricto de preguntas y poco a poco desgrano el origen del "problema", una vez sé qué hay que tratar puedo empezar a preguntar de qué manera quiere el animal ser tratado y qué necesita para llegar al equilibrio mental y físico.
Digamos que actúo de intermediario entre tú y el animal, ayudándonos a encontrar el origen y la solución.

La solución
De todas las posibles he de decir que en el 95% de los casos tratados el animal ha decidido ser tratado con Reiki ( técnica milenaria japonesa que consiste en la transmisión de energía para armonizar cuerpo y mente), preparados florales (extracto energético de flores) y/o gemas (piedras minerales tales como cuarzo, turmalina, etc.). Con estas tres opciones he ayudado a numerosos animales a superar enfermedades, traumas, problemas musculares y en algunos casos hasta hacer de su muerte un camino llano, sin dolor ni sufrimiento (físico o mental). Porque también hay ocasiones en que el animal ya no desea seguir luchando y prefiere ser tratado para afrontar la muerte e irse en paz; cosa dolorosa para nosotros pero que tenemos que afrontar de la mejor manera posible.
He aquí pues una oportunidad mágica para relacionarte con tu comapñero animal sincera y naturalmente.

¿Qué animales puedo tratar?
Cualquiera que quiera ser tratado; la primera pregunta que formulo al animal es si desea ser tratado y sea cual sea la respuesta mi deber como terapeuta es respetarla.

miércoles, 19 de diciembre de 2012

Esencia de uno mismo

Esta vez os quiero transmitir una experiencia personal muy valiosa, sencilla y efectiva, hace un tiempo mi compañero de camino y padre de mis hijos, pensó que si tomamos esencias florales o de otro tipo para mejorar estados alterados de nosotros mismos, por qué no probar de hacer esencia de uno mismo un día de aquellos que llamamos perfectos, un día en que todo nos fluye y nos sentimos plenamente parte de un todo; la idea surgió desde el interés por la salud emocional de nuestro primer hijo, Aran, este es un niño de aquellos que llaman la atención porque cuando están en harmonia iluminan el espacio sin esfuerzo, pero como todos, tiene días en que el equilibrio se pierde entre lloriqueos propios de la edad y estancias y personas que llevan demasiadas "visitas" en las espaldas; así que un día en que Aran rebosaba alegría y harmonia lo pusimos en la bañera a jugar, estuvo veinte minutos disfrutando en el agua, y antes de aplicarle el jabón recogimos en un recipiente de 30ml, 15 ml del agua que había estado en contacto con él.
A esta cantidad de agua le añadimos 15ml de alcohol (brandy), y así obtuvimos tintura madre de esencia de Aran, en estado puro.
De este bote pusimos 4 gotas en otro de 30ml con solo agua.

El primer día que notamos a Aran desubicado le dimos cuatro gotas, y rápidamente surgió efecto, ya que Aran volvió a ser él mismo en esencia.

No se trata de abusar, me refiero a que de vez en cuando es bueno tener un mal día y poder reflexionar sobre ello, pero a veces cuando el mal día se convierte en mala semana y no encontramos soluciones racionales a las preocupaciones, sobre todo cuando los pequeños de la casa no saben explicar con detalles lo que les ocurre, va bien ayudarles, además, no les estamos dando nada ajeno a ellos, sino que ayudamos a centrarlos y después, claro está, a valorar la situación de forma que ellos la puedan entender.

Espero que lo probéis porque es realmente eficaz, barato y sencillo.

Gracias

Mixeta, una gata dominante

Mixeta es una gata de 4 o cinco años de edad, adoptada a los ocho meses en una protectora, está operada y es muy muy dominante, hasta el punto de atacar a su compañera felina sin importarle hacerla sangrar en ocasiones, y a atacar a su "dueña".
Se me consultó por este motivo, la chica que la había adoptado la quiere muchísimo, ha aguantado ataques fortuitos, peleas constantes hacia la otra gata, las ha tenido separadas dentro de un mismo piso, e incluso había consultado a  un educador felino, esperando recibir indicaciones acerca de cómo tratar la agresividad de Mixeta.

Este es un caso claro de cómo los animales nos muestran el camino incansables y asumiendo la responsabilidad de hacer notar la necesidad imperante de un cambio.

La visita del educador felino fue la esperada, en el sentido de qué dió pautas de cómo actuar cuando Mixeta decidía atacar "sin más" a su compañera, pero estamos en lo de siempre, podemos actuar sobre la consecuencia de una forma lógica y estudiada, pero ¿qué pasa si no actuamos sobre la causa?, pues que la consecuencia se repite una y otra vez; no es que el educador no sea bueno, que las pautas no sean las correctas, o que no lo hagamos bien, simplemente que no eliminamos la causa de tanta discordia; es importantísimo averiguar el motivo real desencadenante de tanta agresividad y por eso se me llamó.

Cuando llegué a la casa Mixeta intentó marcarme con su olor, intentó marcar mi maletín, mis piernas, intentó jugar con el péndulo, se paseaba por la mesa sabiéndose la reina del hogar... A cada intento de dominancia sobre mi, yo la apartaba sin mirarla, sin darle importancia, es muy importante que no intuyan un ápice de desespero porque sino estamos perdidos, tienen que ver que no nos importan, que no nos molesta en absoluto su intento de dominar, porque si nos fijamos en los gatos que llevan el control de una manada emocionalmente sana, veremos que el macho alfa no se molesta en agredir a sus compañeros para hacer notar su valía, simplemente los aparta de su camino, sin exceso de agresividad, porque se sabe ganador.

Esta fue la primera lección, pues, no estresarse por los movimientos persistentes de Mixeta, actuar con calma.

Al cabo de unos minutos ya no insistía en jugar con mi péndulo y respetaba mi espacio, observándome desde una mesita cercana; testé pues y salieron esencias de Bach y de Saint Germain que tratarían la agresividad y la dominancia en un primer plano, así cómo algún trauma del pasado, debían tomarlas del agua común.

Un mes más tarde volvimos a visitarnos, y he de decir que los resultados no fueron los esperados, Mixeta seguía muy agresiva y lo único que había mejorado es que desde que tomaba las esencias florales se dejaba acariciar gustosamente; así que volvimos a testar, y la sorpresa (aunque cada vez pasa más a menudo) fue cuando se nos indicó que las gatas no debían tomar más esencias, sino que debía ser la "dueña" la que empezara a tomar flores, y no salieron esencias para la agresividad sino esencias para tratar problemas íntimos de la persona que nada tenían que ver con dominancia ni agresividad.

Y así lo hicimos, testamos las esencias florales, hablamos sobre ellas y sobre cómo se sentía ella al respecto, he de decir que, aunque perdida, las ganas de encontrarse a ella misma eran muchas y la colaboración fue de gran ayuda.

Un mes más tarde, en la siguiente visita, la chica estaba encantada y asombrada del cambio de las gatas, ya no había más peleas, podía acariciar a una y otra sin temor a que se pelearan y las tres disfrutaban del hogar sin problemas.
La chica siguió tomando esencias florales y empezamos un camino precioso de  crecimiento que nos tomó dos visitas más; desde entonces la pequeña familia disfruta de paz y la chica está encantada con su nueva vida.

Una vez más doy las gracias a los animales que tan sabiamente nos ayudan a ver lo que pretendemos esconder en el inconsciente y que no nos deja crecer en el consciente.

Gracias















Tulí, un perro muy apegado

Tulí es un perro de raza pequeña, tiene cinco años y no está castrado; 
me llamó su "dueña" ya que Tulí era muy nervioso, celoso de su comida, celoso de su espacio, intentaba atacar a todos los perros que se encontraba en su camino y a los que eran más pequeños (en tamaño) los intentaba montar para dejar clara su posición de macho alfa; en alguna ocasión había intentado morder a la niña, y cuando sus dos compañeros caninos jugaban, éste entraba en crisis y empezaba a ladrar muy nervioso, como si no entendiera el juego; además seguía incansable a su "dueña" por toda la casa, no se le tiraba encima pero no se separaba de ella ni un segundo, y ésta, cansada de la pequeña sombra decidió que era el momento de hacer algo al respecto.

Me contactó para que hiciera una visita y quedamos; lo primordial para ella era que Tulí se calmara y que no viera al resto de perros como una amenaza, ya que comparte casa con otros dos perros, y que se desapegara un poco ya que empezaba a ser agobiante, así que testamos de qué forma podríamos ayudarle.

Salieron esencias florales de Bach encaradas a sus primeros meses de vida, y a los traumas residuales que dejaron 4 meses encerrado en una sala con su madre y sus hermanos; podéis imaginaros que el animal estaba muy estresado, entre ladridos constantes y la lucha natural que conlleva el alimentarse. Cierto es que amamantarse es natural pero también lo es que hay animales que por su naturaleza lo viven como una competición por su supervivencia, y este es el caso de Tulí, además el hombre que lo tenía no cuidaba bien de sus cachorros ya que cuando lo adquirieron estaba mal nutrido. 

Las esencias pues le ayudarían a limpiar su mente y su corazón de los traumas que adquirió en sus primeros meses de vida, a entender el juego natural que sus compañeros practicaban sin estresarse por ello, y a entender que no necesitaba de la protección constante de su "dueña"; y así fue, Tulí se relajó, ya no ladraba al ver jugar a otros perros, ya no intentaba atacar sin más a otros de su especie, ya no hizo ademán de morder a nadie, ya no vivía el momento de alimentarse como una lucha de poder y ya no seguía incansable a su "dueña".

Podemos afirmar que ahora Tulí está limpio de traumas, es un perro feliz y que ha aprendido los comportamientos naturales de su especie.

Muchas veces pensamos que por ser animal, éste no tiene conciencia ni traumas ni pensamientos negativos, y qué bien haríamos si de vez en cuando miráramos el fondo sin importarnos los clichés sociales, podríamos mejorar tanto su calidad de vida como la nuestra, simplemente con escucharlos de corazón.

Gracias

   

Rex, una leishmaniasis bien llevada

Rex, un perro cruzado de once años tiene leishmaniasis; unos análisis lo confirman definitivamente después de las sospechas de sus "dueños", siguieron el tratamiento común, es decir, Zyloric  y Glucantime, para que la enfermedad no prosperara ya que no tenía ningún órgano afectado, por parte de los veterinarios se consideró que las heridas eran "incurables" y sin importancia, y he de decir que por heridas me refiero a ver parte de la pata en carne viva. 

A mí me contactaron para ver qué se podía hacer con las heridas y con la apatía que sentían padecía Rex, y así lo enfocamos, no tratamos de eliminar la enfermedad sino de mejorar la calidad de vida del animal; testé qué le ayudaría más y el resultado fue el siguiente, un cóctel de esencias florales, limpieza diaria de las heridas con aceite esencial de árbol de té, y Reiki pasado por su compañero más allegado.

Las esencias florales en este caso no se encaraban a la enfermedad ni al carácter del animal, sino que iban directas a tratar la situación familiar del momento.

Esencias de Bach que en conjunto ayudarían a la familia en los cambios necesarios que se debían afrontar,pero también esencias de Saint Germain para abrir el corazón al amor y sincronizarnos con el nuevo orden planetario.

Una vez más un animal acompañado de una familia consciente opta por ser el peón que da la primera señal cuando las cosas no funcionan; Rex tomó las flores que la familia necesitaba, le pasaron Reiki, le curaron las heridas con amor y constancia, heridas recordemos tildadas de "incurables y sin importancia", y mejoró de tal modo que con once años y una leishmaniasis corre por los campos y salta de alegría como si en realidad tuviera cuatro años.

Cuando se terminó la caja de medicamentos la familia optó por no comprar más y seguir confiando en la fuerza de Rex y en que cuando lo necesitara volvería a dar señales claras.

Aunque a veces la enfermedad no desaparece es posible llevar una vida plena sin síntomas, sin medicamentos, y sin heridas constantes e incesantes.

Gracias por vuestra lectura