Después de una larga conexión con Chester, le preparé una crema de flores de Bach en la cual había las flores típicas para heridas que producen picor y enrojecimiento y algunas otras que él pidió.
Unas semanas más tarde me enviaron la foto con el resultado final, y ya veis que la piel le ha quedado como nueva.
No nos cerremos unicamente a las fórmulas hechas y rehechas, investiguemos el por qué real por el cual padece el animal ( o persona), porque aunque la exteriorización del problema sea la misma que la de otro ser, sus motivos seguramente sean muy distintos.